Consejos en el uso del perfume
El perfume es parte integrante de la seducción, por ello es conveniente tener en cuenta estos consejos:
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- Aplicarlo en los lugares de mayor pulsación corporal: en las muñecas, en los pliegues del codo, detrás de las orejas y de las rodillas, y en la nuca. Es decir, en aquellos lugares donde el calor natural de la piel exhala las notas que contiene.
- Rociar siempre, un poquito, en el borde interior de las prendas, para que la fragancia se difunda a cada paso, dejando una estela perfumada al pasar.
- Un mismo perfume llevado por dos personas parece diferente porque la piel reacciona de manera distinta a las esencias.
- Los perfumes unisex son aconsejables para cualquier hora del día, ya que son frescos y no tienen una concentración alcohólica muy intensa.
- Para perfumar la casa, pueden colocarse unas gotas de perfume en el humidificador o vaporizando una nube de perfume sobre una lámpara, mientras se encuentre apagada.
- Colocando unas gotas de perfume en una muñequilla de algodón, puede hacer maravillas en el interior de una maleta, en el armario o en los cajones de nuestra ropa.
- Los cuatro enemigos de los perfumes son la luz, el tiempo, el aire y el calor, para protegerlos es conveniente conservar el frasco dentro de su caja original.
Precauciones en el uso de los perfumes
- Nunca usar un perfume que contenga alcohol, antes de exponerse al sol o inmediatamente después, el alcohol podría fijarse en la piel y provocar manchas oscuras.
- No mezclar nunca un perfume con otro, porque dos fragancias excelentes podrán originar un olor desagradable.
- No utilizar un buen perfume con un desodorante de baja calidad. El perfume sólo combina con un desodorante de la misma gama o con uno neutro
- No vaporizar perfume sobre perlas, ni joyas en general, ya que podrían alterarse.
- No rociar con perfume artículos de cuero o pieles, de lo contrario, podrían ponerse amarillas.
Causas que modifican el comportamiento de los perfumes en nuestras pieles
Existen diversas causas que alteran y modifican el comportamiento de un perfume. Causas generalmente fisiológicas que ayudan a la permanencia del perfume, como una piel portadora rica en grasas, o a su rápida volatilidad. Entre estas últimas están:
- Las pieles secas y ácidas.
- Las dietas pobres en grasas.
- El uso de medicamentos, anticonceptivos, antibióticos.
- El embarazo.
- La traspiración excesiva.
- La comida especiada.
- El fumar.
Fuente: Publicación,Gheve. Grupo Hispano Egipcio de Perfumes.Aswan. Egipto
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